Powered By Blogger
Mostrando entradas con la etiqueta Gonzalo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Gonzalo. Mostrar todas las entradas

martes, 19 de enero de 2021

DIARIO TEMA 1: Objeto de debate...

 En este primer tema, surgieron una serie de conceptos que muchos de nosotros desconocíamos hasta ahora: translingüismo, flipped classroom, método CALL, etc. 

Una vez más, la forma de orientar las clases para este tema 1 ha seguido una metodología activa, en la que hemos tenido que reflexionar o buscar información por nuestra cuenta, siendo nosotros los protagonistas. Sin embargo, el partir de una explicación teórica previa, apoyada en unos Power Point muy visuales, ha hecho que consigamos seguir el hilo de la sesión y el propósito de la clase, así como enfocar bien los ejercicios y los debates grupales. He aquí un ejemplo más de que la moderación en todo lo que hagamos es crucial. No por emplear más tecnologías, seremos más innovadores ni resultará más divertido. Tampoco por llevar a cabo técnicas metodológicas excesivamente activas, aprenderán más los alumnos y les resultará más interesante. No. El exceso nunca es bueno. 

Las técnicas del Overlapping circles, el Placemat y Google Drive son siempre una opción distinta, original y amena de recoger datos e ideas. Las tecnologías (a veces las más sencillas) también nos están ayudando a innovar, ¡incluso para aquellos que todavía nos consideramos un poco "old school" a este respecto! 

Pues bien, ¿por qué hoy están llamando tanto la atención las metodologías activas de aprendizaje? Parece claro que métodos como las Flipped Classroom o las blended classes (semi-presenciales), entre otras, llaman con más fuerza a nuestra puerta. 

El mundo de la inmediatez, la comodidad y la eficiencia en el que vivimos, nos obliga a buscar soluciones que estén a la altura. La vida diaria está cargada de tecnología a nuestro alcance, pensada para facilitarnos las tareas. Esto es muy evidente entre los adolescentes, cuyo uso de las TIC es hoy una realidad que está al alcance de casi cualquier bolsillo. Por esto, la sobreestimulación a la que están expuestos los convierte en un público difícil de convencer, sagaz y de aburrimiento fácil. De hecho, no habrá demasiadas inquietudes que no puedan solucionar con una búsqueda rápida en Google. 

Consecuentemente, el esfuerzo y la motivación por el estudio impartido en las instituciones es cada vez menor. Así pues, Dulio G. Artaza declara que "sin duda alguna, la escuela tiene que amoldarse al nuevo tiempo que se vive". Y es que los adolescentes están ávidos de poder participar, expresarse y debatir sus propias opiniones sobre el mundo real. En palabras del psicoanalista Luciano Lutereau, los adolescentes son "seres que, en esa transición entre la niñez y la adultez, tienen cada vez más participación social pero necesitan, de todas maneras, el acompañamiento de los adultos". 

Por todo ello, lejos de ser un inconveniente, las TIC son un apoyo a nivel académico para "conectar" con ellos en todos los sentidos. De ahí que los métodos tradicionales en la escuela tengan cada vez menos éxito y lleven al alumnado al más profundo hastío. En consecuencia, florecen las "clases invertidas" (flipped) o las clases online (semi-presenciales o completamente en línea). De esta forma, la mayor parte del trabajo será realizado por el estudiante, desde la comodidad de su hogar, solamente con el manejo de su ordenador, tablet o móvil y acceso a Internet. Así, conseguimos que ellos sean los principales constructores de su propio aprendizaje, mientras que los docentes permanecerán en una posición más pasiva, como orientadores o guías. Serán pues los adultos quienes les faciliten las herramientas pertinentes y les ayuden a discernir entre las fuentes fiables y las que no, pero no harán el trabajo por ellos.

No obstante, hay que buscar la moderación, la mesura, como bien mencionaba al principio de mi entrada, puesto que un exceso de protagonismo del educando, sin control del mismo, causará el efecto contrario de nuevo: la pérdida del hilo de la clase y, por tanto, el agobio. Entonces, las clases invertidas o las blended son una excelente solución para reconectar con los jóvenes, de manera que se aprovechen al máximo las clases presenciales para resolver dudas y poner en común aquello que han realizado en sus casas previamente, apoyados de la tecnología. Este tipo de técnicas son frecuentes cuando la carga teórica de una materia es mucha y es sencillo que pierdan la concentración durante una explicación larga. Por lo que una forma eficaz es que busquen ellos mismos otras explicaciones más visuales/audiovisuales en la red y, a posteriori, debatirlo entre todos en clase para comprobar, de esta manera, que todos (sin excepción) han alcanzado un grado de comprensión satisfactorio de la teoría.

Bajo mi punto de vista, la docencia de una lengua extranjera se presta aún más a estas metodologías alternativas e innovadoras, ya que, afortunadamente, disponemos de mucho material en la nube, bien sean series, películas, programas de TV, entrevistas a famosos, etc. en versión original. ¡Incluso la oportunidad de interactuar con personas extranjeras sin moverse de casa! Emplear elementos de realia en las sesiones es primordial para que le encuentren un sentido o significado a lo que están aprendiendo.

Por supuesto, considero que es en las instituciones educativas donde pueden ofrecerle acceso (a todos por igual) a Internet y a los medios digitales. Desafortunadamente, todavía no estamos de todo preparados para digitalizar todos nuestros movimientos. Claro ejemplo de esto está en los jóvenes que han tenido verdaderas dificultades para seguir las clases de sus institutos durante el confinamiento, puesto que se encontraban sin acceso a Internet (o muy baja señal), u ordenadores escasos para todos los hermanos, etc. O incluso la gente mayor que todavía tiene serios problemas para poder utilizar un cajero automático de su banco. Son situaciones que hemos vivido y seguimos viviendo y que deberíamos poder solucionar o, al menos, aliviar. No obstante, esto es un tema de debate que daría para otra entrada, ¿no creéis?

Pues bien, retomando el tema de las CALL, existen ya juegos de realidad virtual, totalmente sofisticados y realistas, que utilizan contextos o escenas cotidianas (comer en un restaurante, coger un taxi, etc.) para desenvolverse en un idioma extranjero. ¡Os invito a que les echéis un vistazo! Algunas todavía son de pago, pero de seguro saldrán más baratas que viajar al país. 





https://www.mondly.com/vr-for-daydream

https://www.fluentu.com/blog/english-esp/aprender-ingles-con-realidad-virtual/








lunes, 18 de enero de 2021

DOSSIER: TEMA 1: Situaciones y variables de enseñanza de las LE

 El tema 1 ha dado comienzo a esta materia: Didáctica de la enseñanza de las lenguas extranjeras. La RAE define la didáctica de la siguiente manera:

1. adj. Perteneciente o relativo a la didáctica o a la enseñanza.

2. adj. Propioadecuado o con buenas condiciones para enseñar o instruirUn métodoun profesor muy   didáctico.

3. adj. Que tiene como finalidad fundamental enseñar o instruirGénero didáctico. Apl. a pers., u. t. c. s.

4. f. Arte de enseñar.


Atendiendo a este concepto, nos introducimos pues en una asignatura necesaria para la labor docente. En este tema inicial hemos aprendido a distinguir una serie de elementos básicos: lengua materna, segunda lengua, lengua extranjera, lengua vehicular, lengua de trabajo, comunidad de lengua, comunidad lingüística, repertorio lingüístico y las distintas metodologías didácticas.  


Ejemplo de repertorio lingüístico

Hemos conjugado la teoría con la práctica, mediante actividades grupales, de las cuales hemos extraído debates interesantes. El hecho de poder introducir los conceptos mencionados anteriormente en contextos de uso, ayuda en gran medida a su mejor comprensión y posterior memorización. 

Para los ejercicios en grupos, hemos empleado plantillas como Placemat y Overlapping Circles, muy visuales, que perfectamente se pueden aplicar a cualquier temática y debate.




En nuestro caso, hemos utilizado las circunferencias para incluir en ellas las semejanzas en el aprendizaje de una lengua materna y una extranjera y también las diferencias. Resultó enriquecedor poder debatirlo y, posteriormente, hacer una puesta en común con toda la clase. Concluimos que aprender cualquier idioma implica una serie de puntos en común (adquisición de sonidos, vocabulario, fin comunicativo, etc.), aunque existan variaciones en su uso (contextos distintos, más o menos intencionalidad en su aprendizaje, etc.), y que, por tanto, el procedimiento de adquisición debería presentar una estructura muy semejante al de la lengua inicial. Esto es, iniciarse en un idioma extranjero mediante la oralidad, la fonética, la pronunciación y la pragmática, de forma que el enfoque comunicativo se equipare al enfoque más teórico-gramatical, al igual que lo hacemos con nuestra lengua natal.

Apoyados en el Placemat, respondimos entre todos a qué tipo de lenguas (de trabajo, vehicular o habitual) se empleaban en una serie de contextos dados. Todos ellos, contextos de la vida real, realmente cercanos a nosotros. Con este ejercicio conseguimos tener claras las diferencias entre las nomenclaturas.

A continuación, pasamos a las metodologías didácticas (AICLE, ESL, EFL, CALL, etc.) también en distintos contextos. Aunque una gran mayoría coincidimos en nuestras respuestas, cabe matizar el hecho de que pisan cada más fuerte las clases online (semi o full) en el ámbito de la enseñanza. De hecho, si algo hemos aprendido en este último año 2020 es que las nuevas tecnologías son aplicables a casi cualquier ámbito. Y tampoco están funcionando nada mal.

Para concluir la clase, nos hemos centrado en las variables a la hora de enseñar/aprender un idioma dependiendo de la edad del alumno. Vimos que las transformaciones a nivel cerebral y emocional van modificando la forma de adquirir una lengua. Empezando por las edades iniciales (0- 6 años aprox.), que son las "gloriosas" en términos de aprendizaje, ya que absorben e imitan lo sonidos y el vocabulario de manera asombrosa. De ahí que comúnmente consideremos a los infantes como "esponjas". A partir de los 7 años y hasta los 10-11, mejoran su expresión, reorganizan mejor sus esquemas cognitivos y descubren las normas. De los 11-12 años en adelante, comienza un claro periodo de inhibición, intencionalidad para aprender, etc. Por ello, es importante conocer en qué etapa de la vida está nuestro alumnado y tenerlo en cuenta para fortalecer y aprovechar al máximo los puntos fuertes de cada una, así como pulir o mejorar los débiles. 

Por otra parte, también conocer las particularidades de cada lengua (si es mayormente aglutinante o analítica) ayuda a una mejor comprensión de las mismas. Así, el hecho de poseer o manejarse en distintos idiomas es un punto más a favor del educando, puesto que utilizará las estructuras que ya conoce de sus lengua(s) materna(s) para ayudarse/apoyarse en el aprendizaje de una nueva. 

Aquí entra el concepto de "interlengua" o lo que es lo mismo, esa versión de la lengua que el estudiante hace cuando la está aprendiendo, la cual está cargada de interferencias y errores. No obstante, lejos de ser algo negativo, los errores (o faltas) se van desvaneciendo a medida que el educando va confrontando la norma y revisándose a sí mismo/a. La interlengua es algo transitorio fruto del contacto entre dos lenguas, por ende, no se debería considerar como algo errado o inexacto, sino que es un paso más en el proceso de adquisición de un idioma. De hecho, las faltas cometidas le sirven al educador para diagnosticar qué hipótesis falsas se está generando el alumno y poder orientarlo hacia lo acertado.

En definitiva, resulta siempre beneficioso conocer y analizar cómo aprendemos, cómo funciona nuestro sistema metacognitivo y nuestra conciencia metalingüística. Tratar estas temáticas mediante debates de mini grupos y grupo-clase amplía nuestro abanico de conocimiento y potencia nuestro crecimiento profesional y personal.







jueves, 31 de diciembre de 2020

DIARIO TEMA 6: PROGRAMACIONES DIDÁCTICAS. ¿Es necesario programar?

 ¿Por qué es necesario programar?

En vista de las exigencias para presentar una óptima programación didáctica en las oposiciones, mi mente extrae conclusiones de todo esto, más allá de qué es una programación y cómo se hace. Y es que, una forma de organizar nuestro trabajo es programándolo y concretándolo en actividades y tareas que se puedan llevar a cabo. 

Parece que un docente, como bien se indica en las metodologías docentes más alternativas y actuales, es un guía u orientador. Es la cabeza tractora de un grupo de personas, por ello, a priori su función deberá estar perfectamente ideada, diseñada y analizada. Tendrá, entonces, que tener clara su labor y sus objetivos a corto, medio y largo plazo. ¿Y qué mejor manera que dejar constancia de ello en un documento donde se haga visible su idea de enseñanza/aprendizaje? Esto le permite a él/ella, como docente, tener un guion preestablecido del que apoyarse, lo cual le alivia de dudas y de carga de trabajo durante el curso. Asimismo, al tener que evaluar el resultado surgido de tal programación al final de curso, le permite saber cuáles han sido sus fallos y aciertos, en qué puntos hay que cambiar el rumbo y en cuáles no. La programación didáctica se convierte, pues, en un croquis mental y, al mismo tiempo, en una unidad de medida de la calidad de la docencia. 



Y es que una gran profesión requiere de un gran trabajo visible y, sobre todo, invisible. Es bien sabido que cualquier profesión de las consideradas de "servicio social", como bien se indica en un artículo de la revista Value (click para ver), entre ellas, el magisterio, sufre de una gran carga de responsabilidad (no siempre valorada y dignificada) y, por ende, de estrés emocional y mental. El conocido como síndrome Burnout o "síndrome del trabajador quemado" es padecido por una gran mayoría de educadores. Y es que, con el paso de los años y los cambios sociales, cada vez es mayor el peso de la sociedad sobre los hombros de un profesor, quien se ve poco reforzado y apoyado por las instituciones. Consecuentemente, esto repercute en su satisfacción y motivación como profesor/a y, encadenadamente, también en la calidad de su oficio. 



Ahora bien, sabiendo esto, ¿cómo puede ayudar una programación didáctica a mejorar esta situación? Considero que disponer de las bases físicas/materiales y de recursos propios es indispensable para desempeñar un cargo en el que se tendrá que enfrentar no solo a unos alumnos, sino a unos padres y al resto de miembros de la comunidad educativa, los cuales pedirán explicaciones de sus decisiones y resultados. Por ello, contar con una programación no solo es una guía de orientación para él/ella sino también un comprobante o justificante de sus acciones en el interior de un aula. Tener bien asentada, consolidada y correcta una programación didáctica significa tener las ideas claras de lo que se quiere conseguir y, además, resume y refleja todo el esfuerzo que el educador/a está dispuesto a realizar para y por mejorar en su trabajo. Por tanto, es una herramienta de defensa de su profesión, un escudo protector ante los golpes e imprevistos. 

En resumidas cuentas, este tema 6 es harto relevante y útil para nuestra (esperemos) futura labor docente. 

DOSSIER TEMA 6: PROGRAMACIONES DIDÁCTICAS

 


En el presente tema nos hemos enfocado en el conocimiento y análisis de las programaciones didácticas de una asignatura, en este caso, de inglés. Aunque cada docente las puede enfocar a su manera, hay ciertos aspectos que son condición sine qua non para que una programación esté completa. Estos tienen que ver con los elementos curriculares (objetivos generales, específicos, competencias, criterios de evaluación, etc.).

En nuestro grupo, hemos elegido uno de los centros escolares en los que estudiamos. A partir de la rúbrica de evaluación usada para las oposiciones, analizamos individualmente la programación para luego hacer una puesta en común. Todas coincidimos en las mismas carencias y virtudes del documento. Nos ha parecido interesante, como bien mencionamos en la presentación, el formato original, alejado del decreto de currículo, que presentaba. También destacamos su claridad y flexibilización a la materia de inglés. No obstante, ciertos puntos (el plan lector, los elementos transversales, etc.) estaban tratados muy por encima o no del todo completos, además de no haber una relación expresa y/o específica entre los distintos elementos curriculares. 

He aquí la presentación de Power Point para refrescar la exposición que nuestro grupo realizó. 

En un curso académico como este, en el que una pandemia mundial ha azotado los cimientos político-económicos de los países, provocando el caos social, también el ámbito escolar se ha visto profundamente afectado. La inestabilidad se refleja en las programaciones didácticas, en las cuales, muchas de las actividades lúdicas previstas (sesiones de teatro, cines, etc.) no se pueden llevar a cabo, el temario no se finaliza, es inviable contar con auxiliares de conversación, etc. Con todo, esto demuestra una vez más que una programación didáctica es susceptible de modificaciones, ampliaciones y reducciones sin que, por ello, se pierda la esencia del plan inicial y sin que se merme la calidad del proceso de enseñanza y aprendizaje. 

La segunda parte de esta unidad la dedicamos a la creación de una programación didáctica motu proprio, tras haber visto y expuesto las programaciones de diversos centros de Galicia, basándonos en las exigencias y directrices de las oposiciones. Entre todos tratamos de conjugar los conocimientos que tenemos de los elementos curriculares para dar forma a una programación en la que no faltase: una buena contextualización del centro; una base legal de apoyo; unos objetivos concretos y viables (empleando infinitivos para su redacción); unas competencias reales ligadas a unos contenidos; una temporalización lógica distribuida entre los distintos trimestres; una metodología innovadora y activa; unos recursos (en la medida de los posible electrónicos) útiles y enfocados a un aprendizaje funcional y real del idioma; una atención a la diversidad adecuada, flexible, actualizada y ejemplificada; un plan lector posible y atrayente; una evaluación clara, concisa y precisa (que especifique los distintos tipos) y, finalmente, una evaluación de la programación y de su éxito o fracaso tanto a nivel de resultados como a nivel de procedimientos. Todo ello habrá de ser perfectamente coherente, cohesionado y secuenciado. 

Esta actividad en equipo no ha resultado fácil, ya que no es sencillo trabajar toda una clase al mismo tiempo y establecer una conexión. Así, nuestro grupo (que teníamos asignado el último de los apartados) dependíamos directamente del trabajo anterior de nuestros compañeros, para poder cumplimentar correctamente las fuentes bibliográficas y las conclusiones finales. 







martes, 1 de diciembre de 2020

DOSSIER TEMA 5: Diseño curricular y lenguas extranjeras

    Con una metodología activa, donde hemos sido en gran medida los protagonistas de nuestro aprendizaje, y donde hemos puesto en marcha las competencias digitales, lingüísticas, sociales/cívicas, las actividades para este tema han sido completadas con éxito. Pese a ser una temática bastante densa, ya que hemos tenido que buscar y analizar leyes y decretos, el trabajo en equipo a través de Moovi nos ha facilitado la tarea en gran medida. Las presentaciones orales han sido breves y provechosas, con lo que, por esa parte me ha parecido una gran idea el trabajo grupal. Por otro lado, desde mi punto de vista, las continuas presentaciones orales en todas las sesiones de clase se llegan a hacer arduas. Yo propondría un tiempo de inflexión, en el que se viesen con más calma los contenidos de los temas, porque sentimos cierta presión para gestionar el tiempo-calidad de nuestros trabajos. No hablo de retornar a una clase meramente magistral y convencional, ya que, con la ingente cantidad de contenido teórico de esta materia sería un verdadero hastío. Pero sí reducir la presión provocada por el aprendizaje por descubrimiento ya que genera cierto caos, inquietud e incertidumbre de si lo que se está haciendo es correcto o no. Mi idea, en este caso, sería entremezclar ambas cosas, el aprendizaje por descubrimiento en algunas sesiones (mediante el trasteo de los decretos) y también el aprendizaje receptivo/pasivo en otras. Este último de forma que nos aporte un feedback previo a las actividades y presentaciones.



    En mi grupo, nos hemos centrado en el tratamiento de la lengua extranjera en los currículos de FP (click para ver la presentación de Power Point) y entre todas hemos podido comprobar que el idioma está tratado vagamente ya que depende del currículo y las exigencias de cada ciclo formativo. No obstante, la incidencia en el plurilingüismo y en el uso de las lenguas cooficiales de las autonomías es cada vez mayor, tras la entrada en vigor de la LOMCE y de las distintas leyes en pro de la calidad de la educación. Pusimos en marcha nuestras estrategias propias y originales para llevar a cabo la actividad y así logramos solucionar las problemáticas que se nos plantearon con éxito.

  Con respecto a las rúbricas de evaluación usadas entre nosotros, el grupo de iguales, me parece una idea muy buena, ya que nos aportan una retroalimentación de nuestras virtudes y carencias sin que sintamos la intimidación de ser calificados con un número o una nota concreta.

    Las clases con Kahoot nos han aportado un resumen amplio de todo lo referente al diseño curricular de ESO, FP, Bachillerato y EOI y los agentes intervinientes en el mismo. Es una técnica de repaso útil de cara a nuestra futura profesión docente, aunque siempre hay que saber cuándo y con qué alumnado emplearlo.



    La gamificación en el aula es interesante a la hora de mantener la concentración y la motivación del alumnado. Con todo, debe ser usada con moderación, ya que, de lo contrario, los estudiantes se centrarán simplemente en superar el juego y entrarán en un bucle de competitividad del cual no extraeremos el conocimiento y la reflexión crítica que deseamos. 

A este respecto, podemos tomar como referencia para esta materia, un proyecto de innovación docente en el aula de Derecho publicado por la Universidad Complutense de Madrid. En él se proponen diversas actividades (de relacionar columnas, de ruleta de palabras, de anagramas, etc.) que pueden ser empleadas a modo de repaso, en los últimos minutos de clase, para comprobar si el conocimiento de dicha sesión ha sido adquirido correctamente.  

¡Es una buena idea para todas aquellas materias en las que el contenido teórico es amplio y profundo!

  




lunes, 30 de noviembre de 2020

DIARIO TEMA 5: ¿Están bien enfocados los idiomas en nuestros diseños curriculares?

    Con el transcurso de las clases, en las que hemos hecho un repaso de los currículos de ESO, BACHILLERATO, FP y EOI, he podido reflexionar sobre una problemática acuciante: ¿por qué tenemos un tan bajo nivel de inglés en España? 

    Por lo que hemos podido comprobar, tras el análisis de los decretos, parece que entre Gobierno de Estado, Gobierno autonómico, Ministerio de Educación y centros educativos tienen bien diversificadas y descentralizadas sus funciones como agentes de la comunidad educativa. Asimismo, con las últimas leyes educativas, cada vez la presencia de los idiomas extranjeros está más latente en los currículos y, por lo tanto, obtienen un mayor peso y relevancia en nuestra educación. Además, la adquisición de competencias y no de simples contenidos ya está en la base de nuestro sistema. Hemos podido transformar, en mayor o menor medida, un sistema tradicional en un sistema innovador, con un aprendizaje más activo y menos memorístico. Entonces..., ¿ qué falla?, ¿no es lo suficientemente "activo"?, ¿los centros no han sabido ejecutar los elementos del currículo como se esperaba?


    Son diversas las fuentes en las que he consultado para que me diesen algo de luz sobre los motivos de nuestro poco éxito en lenguas extranjeras. Así, desde el quiosco digital Magisnet, hacen un resumen estadístico de los países mejor y peor posicionados en términos del idioma, y parece que España se encuentra por debajo de lo deseable, mientras que los países nórdicos (Suecia, Finlandia, Dinamarca o Noruega) se sitúan en cabeza. 

En azul los países con nivel muy alto, en verde con nivel medio, amarillo bajo y naranja muy bajo. 


    El artículo publicado por Adrián Arcos en Magisnet, sostiene que no solo se trata de un problema de falta de inversión en educación (que también) sino que se observa un estancamiento con los años, es decir, a partir de los 18, nuestros jóvenes no progresan en el aprendizaje del idioma. También es palpable una gran brecha generacional: los adultos y ancianos tienen un escaso o inexistente manejo del idioma de Shakespeare en contraste con las nuevas generaciones. La academia Vaughan, en 2017, salió a la calle para comprobar el nivel de inglés de la población media. Y este es el resultado...



    Es evidente que tenemos carencias en este sentido. Y vemos, que no solo se trata de una problemática generacional, sino que entre los más jóvenes hay dificultades. Y es que, uno de los entrevistados pudo haber dado con la clave: "no lo desarrollamos". Esto es, quizás el hándicap no se encuentre exclusivamente a nivel académico y curricular, sino que fuera de las paredes de un centro educativo, el idioma no se pone a prueba. Aprendemos inglés para aprobar y superar ciertas pruebas, pero no lo aprendemos para mejorar por nuestra cuenta y ser independientes, pese a que las exigencias laborales en este sentido son cada vez mayores. Semeja, por tanto, no ser tanto un problema que se halle en el currículo o en la distribución de las horas de clase de esta materia (estipuladas en 3h/semana en la primaria española frente a las 2 horas/semana de la finesa, por ejemplo), sino más bien de: una instrucción tardía en el idioma, un enfoque totalmente teórico del mismo, una cultura poco abierta a los idiomas y una escasa exposición a los mismos en contextos educativos no formales. 

    De acuerdo con UPSOCL, Finlandia, con alarde de tener uno de los mejores sistemas educativos de la UE, se plantea para este 2020 eliminar progresivamente la enseñanza de asignaturas independientes para estudiar en base a temas. De forma que, en vez de aprender Geografía e Inglés de manera separada, se les pedirá a los educandos que analicen, por ejemplo, el clima de diversos países y lo expongan. Tratarán con esto de que el estudio sea algo conjugado y transversal, procurando que desaparezca la pregunta que todo estudiante nos hemos hecho alguna vez: ¿para qué me sirve estudiar esto?

    Quizás, entonces, desde mi visión personal, también en nuestra escuela seguimos sin enfocar correctamente la competencia aprender a aprender, la competencia cultural y la de iniciativa y espíritu emprendedor. Seguimos sin encontrarle un sentido a los contenidos que aprendemos más allá de la obtención de un título. ¿Sería interesante implementar este revolucionario método finés del estudio por temáticas también en nuestro país? El debate está abierto...